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domingo, 3 de mayo de 2020

Herederos de Argueso

En la localidad castellana de Arija, nació León de Argüeso y Argüeso el año 1801. Emigrado a Sanlúcar de Barrameda, fundó allí en 1822 una bodega, la cual alcanzó tamaño y renombre. Muere en dicha ciudad, soltero, en 28-1-1880. Heredan la bodega sus sobrinos Juan de Argüeso Gutiérrez y Francisca Díez de Argüeso.

En el libro Historia social de Sanlúcar de Barrameda. En busca de nuestro pasado, obra de Narciso Climent Buzón se reseña : 

se introdujo [ León de Argüeso ] en el pingüe negocio bancario, pues era muy frecuente que los montañeses y bodegueros adelantasen préstamos, tanto alimenticios como monetarios, a “mayetas” o pequeños propietarios agrícolas y a cuenta del esquimo de uva que se le debería entregar en la vendimia. En esto estaría la génesis del inicio de la actividad bancaria de algunos montañeses. Queda constancia en el registro de la propiedad de algunos préstamos hipotecarios. En 1875 Argüeso hace uno de 150.000 pesetas a Faustino de la Piedra, a devolver en un año, quedando seis fincas bajo hipoteca. En 1877 prestó 25.000 pta a Enrique Rodríguez Roldán por un año y sin interés, quedando como hipoteca la bodega del Castillo.

Sus tres herederos continuarían los negocios financieros de don León.......

En 1885 hipotecaron a favor de los tres herederos la casa que en Bolsa 16 poseía Rosalía Esper Moyano por el préstamo de 14.000 pesetas. Se efectuaba el préstamo por el tiempo de tres años y seis meses y en rédito de los ocho primeros meses 747 pesetas a pago anticipado, efectuado en el momento de la escritura, formalizada ante el notario Simón Bravo Montalvo. Durante los tres años el rédito sería de al 8% anual, en pago anticipado en cada uno de los tres años, es decir, 1.120 pta al inicio de cada año. " 

En la página Desde el templo del Lucero, se incluye entrada sobre esta casa, obra de Ana Gómez Díaz-Franzón, Préstamos corto plazo (pagarés) por 111.271,25 ptas. y Créditos hipotecarios por 366.328,07 ptas.

En 1889, agencia francesa asigna a la firma Herederos de Argüeso, la calificación U.V. En 1898 la cualificación es de L. O. / O. M., en ambas fechas como Banquiers et négociants.





Dada la actividad bodeguera de esta compañía, el concepto citado indica que también se dedicó a negocios bancarios, al igual que ocurriera con otras empresas andaluzas de la época, como la otra bodeguera González Byass, ésta de El Puerto de Santa María, según reseña Enrique Montañés Primicia en su libro La empresa exportadora de Jerez: historia económica de González Byass 1835 - 1885, pág. 234.

Asimismo, Carbonell y Compañía de Córdoba fué otra de las empresas que complementó su actividad principal con la bancaria, en este caso, al punto de cursar balance al Consejo Superior Bancario e, incluso, solicitar su reconocimiento como banco, sin éxito. Ver entrada a nombre de ésta.