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viernes, 25 de marzo de 2011

Banco Nacional de Mutualidades

El Liberal, 1915. Fondo Antiguo, Universidad de Sevilla.

El Banco Nacional de Mutualidades consta con Sucursal en calle San Gregorio y luego calle Montevideo, de Sevilla entre 1918 y 1924, para Sevilla, Cádiz y Huelva. Delegado Félix Revollar Romero. En 1915, Ricardo Lasquetty en calle Tetuán nº 14.

En Cádiz tuvo oficina en 1917 - 1923; allí en 1922, el director era Fernando Portillo Ruiz; ver entrada de éste.
Balance a 31-12-1916.


En Córdoba, consta José Calderón Nuño como su delegado en 1918.

En 1918 se anunciaba como sociedad anónima, con  capital de 1 millón de pesetas, bolsa de operaciones hipotecarias, imposiciones a plazo con destino a hipotecas, cuentas corrientes con garantía hipotecaria, préstamos hipotecarios.....

Fundado en 15-6-1915, ante el notario Toribio Jiménez Bayón.

En 1916 tenía el capital de 1 millón de pesetas, en acciones de a 500 y los directivos eran Rafael Picavea Leguía, Zulueta, Jesús Rubio Coloma, M. Cabrera ( Inspector general de Pósitos, Jefe de Estado  Mayor y profesor de la Escuela Central), Larrucea.

En 1922 estaba en Alcalá nº  52, Madrid, teléfono 3045-M y tenía capital de 3 millones de pesetas, resguardos hipotecarios.

Consejo de Administración: presidente Rafael Picavea Leguía (empresario y político guipuzcoano, intervino en la fundación del Banco de Vizcaya  próximo al vasquismo político, colaborador de la Dictadura de Primo de Rivera, católico, diputado y senador, periodista; suscribe el 11-4-1900 la escritura de fundación del Banco de Burgos.), E. Bertrand, Jesús Rubio Coloma (director general), E. Bellsolell Tousquets y Antonio Pozzi; Charles Berrogain, presidente del Consejo de Administración.


Activo entre 1915 y 1931, si bien el 19-9-1926 se declara en liquidación voluntaria "por no interesarle el régimen autorizado para el ahorro", según su liquidador, José M. López. Domicilio en calle Mayor nº 4 de Madrid.

A pesar de la fecha en que actuó, no estuvo inscrito en la Comisaría de la Banca Privada, ni en el Comité Central de la Banca Española, tampoco en el Consejo Superior Bancario.

En 1933 los clientes sólo habían cobrado el 20%, por lo que la Inspección de Seguros decía que estaba en quiebra y proponía multa para el liquidador Rafael Picavea Leguía.

Anuncio en Anuario 1922.